[ROJAVA] LA COMUNA INTERNACIONALISTA SOBRE EL ACUERDO CON EL REGIMEN SIRIO

“El acuerdo con el régimen sirio no cambia nada”, dice la Comuna Internacionalista de Rojava.

La Comuna Internacionalista de Rojava ha emitido una declaración sobre el acuerdo entre la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria y el régimen sirio.

La declaración dice lo siguiente:

“Después de que la Administración Autónoma Democrática del Norte y el Este de Siria lograra concluir un acuerdo militar con las fuerzas del régimen sirio el 13 de octubre, la situación político-militar en el terreno ha adquirido cierta complejidad. Innumerables especulaciones y desinformación deliberadamente dispersa circulan en las redes sociales, y también se difunden a través de las principales agencias de noticias. Causan incertidumbre y confusión en el movimiento de resistencia global. Por lo tanto, es importante echar un vistazo a los hechos sobre el terreno.

Ya en la noche del 13 al 14 de octubre, se difundieron rápidamente los primeros informes de que unidades del Ejército Árabe Sirio (SAA) habían entrado en las áreas liberadas del nordeste de Siria. Las imágenes en los medios estatales sirios sugirieron que las tropas habían tomado el control total de las ciudades de Tabqa, Raqqa, Hasakeh y Til Temir. Sin embargo, las tropas del estado sirio central solo tomaron posiciones en Ayn Issa, al sur de Kobane, y en Til Temir, al sur de Serekaniye. El acuerdo, alcanzado después de largas negociaciones, establece que las fuerzas gubernamentales, como las fuerzas armadas regulares del Estado sirio, tomarán sus posiciones en la frontera norte del país y, junto con las Fuerzas Democráticas de Siria, defenderán la soberanía y la unidad de Siria contra la agresión turca. Este es un acuerdo puramente militar, y contrariamente a toda especulación, la presencia de las fuerzas del gobierno sirio no afectará al autogobierno o las fuerzas de seguridad interna en las áreas liberadas. La misión de las tropas sirias sigue limitada a defender el país conjuntamente contra el ejército de ocupación turco.

Después de que las últimas tropas estadounidenses huyeran a toda prisa con el inicio de los primeros ataques turcos contra Manbij, en el 14 y el 15 de octubre, las tropas del SAA tomaron varios puntos y se posicionaron en el frente norte y oeste de Manbij. Sin embargo, con la excepción de la llegada de los primeros soldados sirios a la ciudad de Kobane, no ha habido reubicación de las tropas del gobierno sirio a las zonas fronterizas amenazadas por la invasión o incluso a las zonas de combate más activas. Además, actualmente no hay presencia de la policía militar rusa o del SAA en Manbij. El SAA se ha posicionado junto con el Consejo Militar de Manbij en los frentes norte y oeste de la ciudad y no ha asumido ninguna función dentro de la ciudad.

Es importante enfatizar que el acuerdo que se está discutiendo ahora no representa un cambio en el curso táctico de la Administración Autónoma, sino que es la continuación directa del enfoque del movimiento hacia una solución. La estrategia de autonomía democrática nunca fue un proyecto de secesión del Estado central sirio, sino la búsqueda de una solución a la crisis dentro de la unidad democrática de todas las partes de Siria. Siempre se ha enfatizado que una solución a la crisis política de Siria y, por lo tanto, el fin de la guerra sangrienta, solo se puede lograr a través del diálogo exitoso dentro de Siria. La condición para el regreso a largo plazo de las tropas del gobierno sirio a los territorios de la Federación Democrática ha sido siempre el reconocimiento constitucional de la Administración Autónoma, de todos sus órganos locales y transregionales, sus fuerzas de autodefensa, y los derechos de todos los grupos étnicos y religiosos de Siria.

La urgencia de la situación, especialmente por la inminente amenaza de genocidio, hizo necesario dar un paso hacia el régimen e invitar a las fuerzas gubernamentales a defender a Siria juntos. Si el acuerdo se implementara con éxito y las fuerzas de autodefensa y el SAA lograran conjuntamente expulsar a los ocupantes del país, esto sentaría las bases para un nuevo proceso de solución política con Damasco. El acuerdo también daría la oportunidad de expandir la lucha a los territorios ocupados al oeste del Éufrates, es decir, Jarablus, Bab, Azas, Mare y Afrin, lo que permitiría el regreso de cientos de miles de personas desplazadas.

Es importante enfatizar una vez más que nada cambia en la administración política dentro del nordeste de Siria con este acuerdo. La revolución tiene sus propios principios, y estos no son negociables; ni con los Estados Unidos, ni con Rusia, ni con el régimen sirio. El proyecto de una Siria unida, democrática, federal e independiente continuará definiendo el curso del diálogo con el gobierno central. Con la excepción de las declaraciones oficiales del autogobierno, no se debería dar crédito a las especulaciones. Y el acuerdo no cambia nada para la resistencia global. La guerra de agresión turca y la resistencia contra la ocupación continúan, con o sin tropas del régimen. Por lo tanto, el movimiento de solidaridad internacional no debe desviarse de su camino y ha de intensificar aún más la resistencia”.