Rojava Parte Dos: El camino a Kobane / La ciudad esquelética

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Lee Rojava parte I aquí

Por ‘El Errante’

Está oscuro en Kobane, mucho más oscuro de lo que esperarías de una ciudad de 150.000 almas. Algunas luces parpadean y crepitan del polvo y la noche envolventes, y el silencio se rompe por el ruido del rechinamiento de los generadores eléctricos y el sonido de los camiones de basura llenándose de escombros y luego conduciendo a uno de los vertederos fuera del centro de la ciudad. Ha pasado casi un año desde el asedio y todavía no hay electricidad. Estoy sentado en el porche del único hotel real en Kobane bebiendo té dulce en un vaso (uno más). Estoy contento de que conseguí venir de Amuda aquí, la carretera fue larga, escalofriante, pero ahora, la carretera se acabó.

Mi conductor me recogió a las 6am de la mañana después de una noche sin dormir en un puesto avanzado de las YPG en Amuda. Tal como salía por la puerta, un soldado de las YPG me lanzó una pita caliente. La doblé en cuartos y la metí en mi mochila – algo para comer en el camino. Me fui demasiado pronto para desayunar. El tío que me recogió, Salah, conducía una de las omnipresentes furgonetas Hyundai blancas (o Toyota), me puse en la parte delantera, y salimos a toda prisa. Cuesta 4 horas ir de Amuda a Kobane, suponiendo que la carretera no esté cerrada por cualquier razón.

Rojava dispatch (2) 2El escenario era muy similar al de entre Amuda y Serekaniye, más pueblos, cientos de pueblos, y los campos que no estaban utilizados estaban llenos de algodón y melón.

Entre la frontera con el KRG y Serekaniye hay muy pocos indicios de que la Región Autónoma kurda está en guerra con nadie. Una vez dentro de Serekaniye, esa impresión desaparece rápidamente. Edificios grandes están llenos de marcas de agujeros de fuego de armas pequeñas, y aquí y allá uno puede ver signos de golpes de munición mayor. De hecho, Serekaniye fue una de las batallas secundarias luchada antes del asedio de Kobane en Noviembre de 2012. Está directamente situada en la carretera a Kobane, justo en la frontera turca, y si hubiera sido tomada por al-Nursra, las líneas de suministro a Kobane hubiesen sido cortadas. Las YPG respondieron rápidamente a la amenaza y lucharon victoriosas, finalmente echando a los yihadistas. La zona alrededor de Serekaniye está todavía algo disputada aunque la última operación realizada durante la primavera parece que ha acabado con cualquier amenaza militar de perder la ciudad.

Rojava dispatch (2) 3Y en la carretera se puede ver cómo de serio se toman la amenaza las YPG/YPJ y Asayis – entre Serekaniye y Kobane hay establecidos múltiples bloqueos de carretera y trampas. Pasamos por un punto donde una mina había volado por los aires mitad de la carretera y finalmente se cortó mediante equipo pesado de construcción. Un cohete explotó contra la carretera por la noche y definitivamente se cerró. Mi conductor se encogió de hombros, y continuamos a través de una carretea sucia que rodeaba la obstrucción. Habías conducido como 5 millas cuando nos encontramos con un puesto de control de una milicia árabe. Salah dijo algunas palabras en árable y luego preguntó claramente, “¿YPG?”. A lo que la respuesta fue un apretón de manos y el murmuro del acrónimo en árabe de alguna otra milicia. Mi conductor hizo una mueca y continuó. Aquí es cuando mis nervios empezaron a superarme y necesité que parase y me asegurase que todo estaba bien. Él se encogió de hombres y dijo, “Syria.” Entonces supe donde estábamos. En algunas de las zonas de Rojava, algunos enclaves se han declarado de Siria, esto incluye la zona de Qamishli junto a la frontera turca, y evidentemente el pequeño pueblo por donde estábamos pasando – como demostraba una bandera siria que flotaba con orgullo de un poste telefónico. Unos cuantos giros más y ya estábamos de vuelta a la carretera dirección Kobane, pasando un puesto de control de Asayis o YPG cada diez millas. Señales que llegué a apreciar y espera ver por varias razones.

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En el último camino de acceso a Kobane desde el este, finalmente te das cuenta de que sí, estás en una zona de guerra. Se ha levantado una gran cordillera de tierra visualizando eficazmente la ciudad desde lejos y en todas partes aquí y allí se pueden ver trampas para tanques sobresaliendo de la arena. Pasando esta pared de arena, la ciudad se levanta y muestra sus heridas. Grandes zonas de las afueras de la ciudad se han convertido en grandes vertederos de cemento, acero doblado y coches quemados. Entonces un edificio te llama la atención, sólo se mantiene en pie la mitad y se inclina curiosamente hacia su vecino; sus pisos están en varios estados de la geometría anti-euclideana. Cuando llegas al centro de la ciudad, te encuentras con bloques enteros arrasados y golpeados hasta escombros, y aquí y allá se puede ver un edificio intacto incluso por disparos de armas pequeñas rodeado de los restos descomunales de sus antiguos vecinos. La suerte cuenta. Las calles están llenas de polvo, y ocasionalmente pasa un tanque de agua en un intento en vano de mantener el aire respirable. Esto en combinación con las retroexcavadoras excavando los restos de cucharadas en cucharadas y el movimiento constante de camiones pesados que toman el detritus a los crecientes campos de cemento y acero, asegura que Kobane está casi siempre ahogada en polvo. De hecho, mi primera noche salí al anochecer y la ciudad parecía más un cuadro impresionista de Monet que cualquier otra cosa. Los edificios se fusionaban unos con otros en el polvo, los colores y figuras se suavizaban y se perdían. Una radiografía borrosa de una ciudad.

Rojava dispatch (2) 5A pesar de que vuelve a Kobane a diario, de hecho con el estado real barato – pagas lo que puedes – hay un tipo de carrera por la propiedad. Por ejemplo, un hombre árabe con el que hablé compró una casa, completa, por cerca de 15.000 libras sirias (80 dólares según las tasas de cambio actuales). No está mal.

Es tarde, estoy cansado y he desarrollado una actitud seriamente negativa hacia las letrinas sirias. Mañana es momento de investigar la cuestión de la revolución, y hablar con los residentes de esta ciudad en proceso de renacimiento lento.

Fuente: Anarchist News

Fotografías: http://modernslavery.calpress.org/?p=889

Traducido por ‘Rojava no está sola’

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